¿Cómo evoluciona hacia el futuro la tecnología Blockchain?

A lo largo del pasado año, la criptodivisa y la blockchain se han establecido en el escenario global, pero no han podido conseguir una adopción masiva. Y lo que es peor, debido a la naturaleza compleja de la criptodivisa, cuando se consigue el interés del público general, no pueden actuar debido a la falta de recursos.

Para abordar estos problemas, primero debemos comprender una breve historia de la tecnología blockchain. En breve (e increíblemente abreviado), Bitcoin, la primera generación de blockchain, dio paso a Ethereum, la segunda generación de blockchain, que a su vez ha preparado el camino para una variedad de diferentes blockchains de tercera generación que están intentando hacer que las criptodivisas sean viables a escala global.

Para evaluar la capacidad de la blockchain de tercera generación a la hora de competir en un escenario global, es también esencial comprender cómo las blockchains de criptodivisas han evolucionado y evaluar si los líderes actuales de procesamiento de pagos están a su vez evolucionando o no.

Para evaluar la capacidad que tienen las blockchains de tercera generación de superar el status-quo de las transacciones actuales, debemos establecer una referencia estándar. Para esto, compararemos la criptodivisa con una empresa de tarjetas de crédito, centrándonos en la seguridad.

La criptodivisa, siendo una divisa digital que está controlada individualmente, requiere necesariamente más seguridad que las tarjetas de crédito. Desde el punto de vista del cliente, es bastante sencillo. Si el cliente informa de un fraude, la empresa de tarjetas de crédito investigará, y generalmente devolverá el importe como crédito a la cuenta.

Pero, ¿es así de simple? Tenga en cuenta que la mayoría de estos cargos resultarán en pérdidas para la empresa. En 2018, se pronostica que las pérdidas para el sector de las tarjetas de crédito se acercará a los 10.000 millones de dólares. Estos son costes que eventualmente se pasan al cliente de una forma u otra.

Así que, aunque la criptodivisa puede implicar un mayor riesgo, en teoría, en la práctica existen muchas formas diferentes y sencillas de proteger a la criptodivisa de forma segura durante periodos prolongados de tiempo. Debido al inherente deseo de proteger a la criptodivisa, la comunidad evoluciona constantemente y aprende nuevas formas de mantener sus divisas cada vez más seguras.

El sector de las tarjetas de crédito ha adquirido interés a la hora de mejorar su seguridad, pero los datos reflejan su incapacidad para tener un impacto significativo en el fraude en su propio patio trasero.

¿Cuál es el futuro?

No hay forma de predecir el futuro, pero todas las indicaciones dicen que la criptodivisa y las tecnologías de blockchain están evolucionando rápidamente para adaptarse a las necesidades de los consumidores mejor que el sector de las tarjetas de crédito.

Aunque las tarjetas de crédito seguramente no desaparezcan por completo, su pérdida potencial debido a las criptodivisas es sustanciosa. Si la mayoría de las transacciones se mudan a la criptoesfera, esto forzará a que las empresas de tarjetas de crédito evolucionen o mueran.

La evolución forzosa de las tarjetas de crédito y las criptodivisas son una situación en la que los clientes y consumidores ganan, porque ambos escenarios tienen la capacidad de reducir los costes para los comercios, y por tanto, para nosotros.